27/3/13


M. Elena Vallés. Palma "Son perfiles muy especializados que superan la figura de la coordinación. Son gestores de alto nivel", así presentó y describió la directora de la Fundació Palma Espai d´Art, Pilar Ribal, a los adjudicatarios del concurso del Centre de Recursos, repartido en dos espacios: el de Creació y programa de residencia e intercambio de artistas en Ses Voltes, al frente del cual se pondrán los hermanos Eva y Amir Shakouri, y el de Creació Tecnològica en el Solleric, que será gestionado por el barcelonés Lluís Oller.

El concejal de Cultura Fernando Gilet destacó que los proyectos ganadores (en total se presentaron cinco) cumplen con cuatro principios que fueron definitivos para hacerse con la administración del centro. En concreto, se refirió a que en todos ellos se contempla un nuevo modelo de gestión, en el que "será necesaria la gestión proactiva por parte de los ganadores". Es decir, los dos proyectos, licitados por 11.000 euros (el de Ses Voltes) y 10.500 (el del Solleric), aspiran a la autogestión. Por otra parte, ambos tienen en cuenta el trabajo en red buscando colaboradores que puedan aprovechar el desarrollo del proyecto. Y tres: "Son ambiciosos y con ellos también se podrá promocionar la ciudad".

Gilet insistió en que el Ayuntamiento desea dar continuidad al Centre de Recursos -que arranca en abril–, proyecto que de momento ha sido adjudicado por nueve meses. Punto que ha sido criticado tanto por la Associació d´Artistes Visuals como la dels Gestors. "Es nuestra voluntad que siga. E incluso en función del presupuesto del año próximo, aumentaré la dotación", añadió. El concejal prometió que, si el presupuesto se lo permitiera más adelante, sacaría a concurso el centro por varios años. Algo necesario para que proyectos de estas características den sus frutos.

Lluís Oller, al frente del Centre de Creació Tecnològica, pretende que el espacio de la 3ª planta del Solleric se convierta en un lugar desde el que "promocionar las artes audiovisuales, el media art, y las creaciones realizadas con los nuevos medios electrónicos", apuntó. Asimismo será un punto de asesoramiento sobre nuevas tecnologías, páginas web, etc. En uno de los espacios, se impartirán talleres y cursos de temática audiovisual para diferentes niveles: iniciación, especialización, teóricos y otros de reciclaje. En otra sala, estarán los equipos tecnológicos que podrán utilizarse para la creación y producción artística.

Por su parte, Eva Shakouri y su hermano Amir (de Cultural Strategies Partnership y también conocidos por estar al frente de La Caja Blanca, con su propio programa de residencias) harán uso de su experiencia profesional como consultores de arte que impulsan a jóvenes artistas para aplicarlo a este espacio público de Ses Voltes, "una novedad absoluta aplicar esta fórmula eficaz usada en el ámbito privado a la Administración pública", subraya Eva Shakouri. Su proyecto –"sin nuestra experiencia y únicamente con este presupuesto sería imposible ponerlo en marcha", afirmó– pondrá mucho énfasis en la vertiente internacional, "y se intentará generar un diálogo explícito entre Mallorca y comunidades similares". En este punto, los talleres formativos y charlas que tendrán lugar en Ses Voltes irán en un doble sentido: centrados en intercambiar información entre los profesionales de Mallorca, y fomentar la comunicación con los de otros lugares del mundo que viajarían hasta la isla para compartir su conocimiento. En cuanto al programa de residencia, se desarrollarán alianzas con otros programas similares de EE UU, América Latina y el resto de Europa. También pondrán en marcha un programa para artistas jóvenes que despuntan (Emerging Leaders Program). A éstos se les intentará apoyar en la producción de obra. "Si necesitamos más dinero para ello, empezaremos a trabajar en el tema de los mecenas", aseguró Shakouri.

Los planes de acción de los ganadores se podrán consultar en la web del Solleric en breve. El jurado que eligió las propuestas lo formaron Elvira Cámara, Pilar Ribal, Carolina Vicente (técnica de la Fundació), Gaspar Sabater y María José Massot.