diario de mallorca
Las prendas de Eleonora
Lourdes Durán Un título de cuento, Eleonora, de Edgard Allan Poe, da nombre a la aventura de Dolors Caballero y Christina Roeland, cosida puntada a puntada con esmero. Sin embargo, nada guarda relación con la narración del escritor. Eleonora se viste en esta certeza: "En un mundo saturado y veloz, el lino sigue sembrándose por la mañana de un día sereno de primavera... lujo es mantener la voluntad de velar por lo esencial".
Ni Dolors ni Christine son diseñadoras de ropa ni modistas pero poco más de un año atrás, "decidimos montar algo juntas, cogimos un espacio común y buscamos un profesor de patronaje. Encontramos a Toni, que había trabajado con Dior. Decidimos buscar un patrón que se adaptase a la mujer y no a la inversa", cuenta y apunta la artista Dolors.
Algodón y lino cien por cien y Mallorca son sus ejes. El corte de las 27 prendas son piezas fondo de armario, aunque la línea del patronaje se ha atrevido un poco más. "Queremos que sea un tipo de ropa funcional, atemporal, de calidad tanto en su tejido como en la costura", señala Dolors.
Tanto la francesa Christine como Dolors, ambas con décadas ya de residencia en la isla, hacen hincapié en que "es el Mediterráneo" la inspiración. Los vestidos de lino tienen corte de película francesa protagonizada por Jeanne Moureau y los pantalones ajustados con botonadura a los lados, con cierto aire marinero, muy Chanel.
"Al principio creímos que sería ropa para mujeres de nuestra edad, ya maduras y que saben lo que quieren y lo que les queda bien, pero hemos visto que nuestras hijas, de 20 y pocos años, y de 16, están encantadas", cuenta Christine Roelandt.
Maria de Lluc Fluxà les ha cedido el Espai H.C., su galería de la calle Can Ribera, de manera efímera. Incluso la ropa se muestra como si fuera una exposición. El color blanco roto, los crudos, son la paleta de Eleonora. Por el momento. Solo las bolsas bombón ponen color a esta primera colección que puede ir creciendo.
Esta semana, y de manera temporal, muestran su ropa como si fuera una muestra fugaz. El sábado concluye y Eleonora se irá como una Cenicienta. Como es hija de su tiempo, se hará virtual. Solo se la encuentra en la red. En su estreno, ha apostado por el blanco. Hay quien les pide el negro para otras temporadas. "Todo se andará", dice Dolors. Al parecer, Eleonora quiere hacer ropa para niños este invierno.
La galerista y comisaria Maria de Lluc Fluxà, atenta a nuevos momentos de amigas y artistas, asegura que "lo interdisciplinar me atrae, y creo que es bueno que este espacio vaya cambiando según quien lo habite". Esta semana se ha hecho de puro lino, blanco y crudo y se ha llenado de pájaros y de la poesía de Antonio Colinas en su poema La simiente enterrada.
